sábado, 27 de marzo de 2010

Educación a distancia, audio, video y pizarrones digitales interactivos

El acceso a recursos multimedia en el aula ha transformado en muchos aspectos el sentido del aprendizaje a distancia, si bien no todos los docentes dominan la gama de posibilidades que ofrece la tecnología implementada en el aula, de alguna manera hemos ido involucrando, en alguna medida, materiales audiovisuales que han enriquecido nuestra labor y ante todo hemos encontrado la forma de ajustarnos a los diversos estilos de aprendizaje que cohabitan en nuestro salón de clases.
La efectividad en el uso de herramientas como el video y el audio radica en la posibilidad de hacer partícipe al aprendiz del proceso conjunto de construcción del conocimiento mediante la expresión concreta y coherente del contenido didáctico usando un lenguaje específico y basado en la utilización de una estructura audiovisual en función del discurso manejado (Lozano, 2007).

Suele existir la creencia de que el video funciona como mero entretenimiento, sin embargo, el uso correcto de esta herramienta nos permite adentrar a los alumnos y contextualizar sobre cierta temática, que de ser abordada únicamente bajo la exposición o la lectura, tendría baja significatividad. Incluso puede llegar a manejarse como un recurso de sensibilización ante los tópicos que a simple vista parezcan ajenos a la realidad de los participantes del curso, de tal manera que genere en los estudiantes la expectativa de investigar, interesarse y apropiarse de los mismos, aumentando las posibilidades de anclar el conocimiento en ellos.

Los actuales planes de estudio de en la educación básica, abordan la necesidad inherente de los profesores de valerse en gran medida del uso constante y efectivo de los medios mencionados, y si bien no se cuenta con la infraestructura básica en gran parte de los planteles, a estos días no se puede pensar un curso completo en el cual no exista al menos la mención o la recomendación hacia el uso de ellos para reforzar los proyectos de clase. Se destaca sobre todo, en el sistema de telesecundaria, la transmisión satelital de una cantidad importante de diferentes formatos dirigidos hacia objetivos muy específicos, ya sea, detonar una pregunta, promover la reflexión, cerrar un tema a modo de resumen de los puntos más importantes o identificar al alumno con una situación que a la larga lo involucra y lo hace parte de los temas que se abordan. Asimismo, existen recursos de audio que orientan el uso de la imaginación en los jóvenes acelerando la comprensión y capturando la atención de los mismos.

Esto se logra con el diseño adecuado y la adaptación de los géneros y el lenguaje audiovisual al discurso didáctico en uso. Desde la proyección de una película o la reproducción de una canción, hasta los programas especializados que se transmiten vía satélite o internet son recursos válidos, siempre que sean congruentes y no se usen solo para llenar tiempos muertos en la clase; de cualquier manera es importante que se establezca y defina la relación de las transmisiones utilizadas con la clase en cuestión, de tal manera que no aparezca como un recurso aislado y carente de sentido.

Si centramos nuestra atención en la reproducción de video vía web, existen diversos aspectos a tratar que bien resueltos pueden ser consideradas ventajas, tales como la alta calidad en audio y video, uso correcto de títulos, gráficos, pantallas, etc., presentación dinámica basada en apoyos visuales, efectos de sonido, imágenes, etc., disponibilidad e incluso la transmisión de eventos en tiempo real (Lozano, 2007), ya sean conferencias, ponencias o mensajes dirigidos hacia un público específico. Especialmente se observan claramente dos desventajas, la velocidad de la conexión y el abuso en tiempo que puede observar el emisor.

Hablando en concreto del audio, es necesario que haga una referencia personal, ya que en mi experiencia he podido constatar que es una posibilidad en la que ampliamente se logran desarrollar, de manera creativa, soluciones efectivas para hacerle frente a una temática, valiéndose de una cantidad de recursos sonoros que nos permiten vestir una producción, sin dejar de lado, la importancia que tienen los bajos costos con los que se logran resultados óptimos y llamativos para el estudiante. También quisiera mencionar que tomando en cuenta que la producción colaborativa otorga una perspectiva inigualable y una experiencia educativa rica y participativa desde la preproducción hasta la presentación del producto, es también una posibilidad por las pocas necesidades técnicas y los bajos costos ya mencionados.

Mención aparte merece el radiochat, medio por el cual se puede tener una comunicación sincrónica con los participantes, en el que existe la figura del moderador, quien está encargado de fomentar un diálogo reflexivo entre los presentes e interactuar mediante el intercambio de puntos de vista (Lozano, 2007). Nuevamente nos enfrentamos a la problemática que en muchos sentidos resuelven los sistemas de educación a distancia, permitiendo que los integrantes de un curso se presenten de manera asincrónica y participen sin ataduras de tiempo y espacio, sin embargo, se observa que la interacción en este ámbito, puede dar seguridad al estudiante pues le presenta la oportunidad de una comunicación inmediata, clara y confiable con el tutor, cuestión que si se carece de ello genera angustia y una percepción de abandono y deriva, al menos a quienes no están familiarizados con el sistema.

Para realizar una sesión, es importante contar con el soporte de un servidor que sea regular y que permita a los integrantes mantener una conexión prolongada y sin interrupciones, de igual manera las personas que no se presenten tendrán regularmente la opción de repetir la transmisión bajo el esquema de audio en demanda –aplicación que existe también con el video-, es decir, disponibilidad en el tiempo que el usuario lo desee, una ventaja más para quienes deseen retomar la sesión o incluso para quien no estuvo presente en ella.

Aprendizaje móvil
El uso de las TICs en la educación se ha ido incrementando conforme salen al mercado nuevos dispositivos, hace unos escasos veinte años, no se concebía poder realizar actividades tan simples como enviar o revisar correo electrónico, no se diga tener acceso a video y audio en demanda (Burgos, 2010). Sin embargo, en la actualidad existen computadoras ligeras, con un tamaño mucho más portátil que tienen una capacidad superior y que permiten una conexión inalámbrica e inmediata en el lugar en el que nos encontremos; esto permite trasladar todas las actividades que en su momento se realizaban únicamente en ambientes controlados y espacios determinados, cosa que ha revolucionado en gran medida el acceso y la rapidez con la que podemos realizar gran parte de las actividades que en un curso a distancia, combinado, etc. requiere, sin dejar de lado lo que esto a su vez influye en los nuevos ambientes laborales y de aprendizaje. Mayor productividad a menor costo.

Esto ha llevado a los desarrolladores, a generar plataformas mucho más sencillas, básicas y amables con el usuario, sin sacrificar el contenido y elevando el uso de las herramientas que ya se han mencionado, valiéndose de lo que la tecnología nos provee. Audio, video y gráficos son solo algunas de las opciones que están cada vez con mayor disponibilidad en su versión móvil, archivos más ligeros, sencillos de manejar y con la posibilidad de hacer sentir al usuario “conectado” en todo momento.

Con aparatos como una netbook, un Smartphone o cualquier dispositivo que cuente con conexión inalámbrica nos es posible manipular a distancia los contenidos de una página web, correo electrónico, radio y videochat, podcast, etc. rompiendo las barreras del tiempo y del espacio, acercándonos a la posibilidad de participar más activamente en nuestro proceso de formación y disminuyendo el rezago que existe entre los que no cuentan con centros universitarios que ofrezcan la posibilidad de estudiar en un ambiente presencial. Que haciendo la aclaración pertinente, es el más común a nuestros días, pero no es la mejor opción para todos.

Cabe acotar que en México, el acceso a los servicios móviles que ofrecen las empresas de telecomunicaciones, aún es a costos elevados y no es posible aun, generalizar su uso, incluso otro punto en contra, es la dificultad de introducir estos dispositivos entre la población de estudiantes pues la mayoría no cuenta con la posibilidad de adquirirlos aunado a la renuencia que impera para su adopción y utilización.

Ventajas de los pizarrones digitales interactivos
Hasta ahora hemos hablado de las herramientas que a distancia, se convierten en aliadas indispensables en el diseño de un curso en línea, mas existen también, innovaciones en el campo tecnológico que mejoran y visten el aprendizaje en el aula. Uno de ellos es el PDI según sus siglas, pizarrón digital interactivo, generado a partir de una herramienta tradicional como lo es in pizarrón, que en la escuela tradicional se convertía en el recurso principal del que disponía el docente junto con el libro de texto. Lo interesante, es la forma en que se ha ido adaptando a los avances tecnológicos, transformándolo en un centro de proyección interactiva que permite manipular los contenidos y facilita la incorporación de recursos multimedia en el aula.

Ponce (2010), aporta sobre este tema que un PDI se convierte, de una manera muy natural, parte del salón de clase, rápidamente y sin tantos problemas, aunque es necesario preparar la clase con anticipación para evitar contratiempos. Otra ventaja que presenta, es la motivación que genera entre los estudiantes, que bien encausada, puede ser parte fundamental en el éxito de una actividad o proyecto. Permite complementar también, la temática expuesta en clase, gracias al internet y como se ha venido diciendo, algo primordial, es que se pueden conservar todos los cambios y respaldar lo generado en la clase para una mayor disponibilidad de los recursos en el momento que el usuario lo desee.

Agradezco su lectura y espero sus comentarios, espero que pasen unos agradables días de descanso.




Listado de referencias
Lozano Rodríguez, A. & Burgos Aguilar, J. V. (2007) (Comp.). Tecnología educativa: en un modelo de educación a distancia centrado en la persona. Distrito Federal, México: Limusa.
Burgos Aguilar, J. V. (2010). Aprendizaje Móvil: El potencial educativo en la palma de la mano. En Burgos Aguilar, J. V. & A. Lozano Rodríguez (Comp.). Tecnología educativa y redes de aprendizaje de colaboración. Distrito Federal, México: Trillas.

Ponce Sustaita, M. T. (2010). El pizarrón digital interactivo: de la experiencia de su uso en la enseñanza media a las comunidades que aprenden sobre su aplicación. En Burgos Aguilar, J. V. & A. Lozano Rodríguez (Comp.). Tecnología educativa y redes de aprendizaje de colaboración. Distrito Federal, México: Trillas.

Anexo un gráfico sobre Aprendizaje Móvil

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