domingo, 7 de febrero de 2010

Modelo centrado en el alumno, educación a distancia y tecnología educativa

Modelos educativos en los que el alumno es el actor más importante en el proceso de aprendizaje no se ven normalmente, sobre todo si hablamos de educación básica.
Aún existe la creencia de que los niños y jóvenes son incapaces de regular su proceso formativo y es común a nuestros días, el rechazo por parte de los mismos docentes, quienes han encontrado toda una serie de contrariedades y errores en los nuevos planes promovidos por la Secretaría de Educación.
Se argumenta falta de infraestructura y existe la tendencia eterna a buscar culpables. He escuchado quien dice: “Si en mi escuela no tenemos ni luz”, “Los niños llegan a la secundaria sin saber leer”, “Los niños no tienen conocimientos previos”, "Los libros no sirven". Esos comentarios solo dejan entrever la falta de preparación, la renuencia hacia la innovación para dejar atrás los modelos de la escuela tradicional y la resistencia a creer que los alumnos tienen la capacidad de mostrarse activos ante el proceso de aprendizaje.
La motivación juega un papel fundamental para que el estudiante tome las riendas de su formación, descubrir que hay una utilidad y una aplicación al dominio de habilidades y al desarrollo de competencias es la clave para un aprendizaje significativo.
Entonces, la tarea del profesor no pasa a un segundo plano sino que se convierte en una labor conjunta y colaborativa en la que se proveen las herramientas para facilitar y construir el conocimiento. Diseña el curso y las actividades con conocimiento de las características particulares de los estudiantes, sus necesidades, su contexto socio cultural, etc. Todo en base a un curriculum establecido por la institución educativa y los programas educativos vigentes en el país.
Entonces podemos decir que es todo un reto, un cambio completo de actitud, constante preparación y actualización por parte de los docentes; pero con todo lo que implica, los resultados son plenamente positivos.
Trasladándonos a la educación superior y a programas a distancia donde ya se aplica la metodología de un modelo centrado en el alumno, la experiencia es muy enriquecedora, ocurre que el alumno suele sentirse solo y a la deriva, pero a medida que va pasando el tiempo y se comprende la dinámica, se vuelve un reto de constante búsqueda del conocimiento por la satisfacción de hacer un cambio en nuestro entorno, de mejorar, de saber más.
La sociedad está cambiando y los medios son otros, los alumnos son distintos, las necesidades cambian. En la educación como en el resto de las disciplinas desarrolladas por los seres humanos debemos aprovechar los avances en la tecnología, mismos que nos acercan cantidades infinitas de información, cuyo uso deberá ser cuidadoso y responsable por nuestra parte; discernir entre lo que es útil y lo que no. Aquí ubicamos al docente como guía.
Gracias por leerme, espero sus comentarios y retroalimentación.

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